jueves, 27 de noviembre de 2008

¡Qué tiempos los de los aztecas!

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Pues bien, resulta que al pequeño P en el colegio le encargaron presentar, junto con otros 3 compañeros una "conferencia" sobre los Aztecas. Cada uno debía escoger un tema y exponerlo ante el resto (de los trogloditas). Como soy una madre a la antigüita que piensa que el mundo ya existía antes de Wikipedia, nos dimos a la tarea de buscar material interesante en libros de historia, enciclopedias y revistas de arqueología, que es una de mis pasiones. Pues bien, encontramos una joya, el Códice Mendoza, documento preparado en la primera mitad del siglo XVI por anónimos artistas aztecas y llamado así en honor al 1er Virrey de la Nueva España, quien lo solicitó. El Códice habla, entre otras cosas, de la sociedad, de la educación y los castigos impuestos a los niños. Aquí fue donde mi unigénito se interesó. Castigos del tipo espartano, como buena sociedad guerrera que era la azteca: a los niños desobedientes, a los 9 años, les pinchaban con espinas de maguey. A los 11 años les hacían aspirar el humo del chile y a los 12, los desnudaban, los ataban de pies y manos y los dejaban así un día entero. ¡Esos sí eran castigos! No como los de ahora tipo "Esta semana no hay derecho a televisión" o "A dormir temprano y sin postre", etc. etc. ¿Qué madre no ha tenido en ocasiones instintos asesinos cuando su vástago decide seguir despierto a la medianoche en noches ya agendadas como noches para la pareja? ¿o cuando decide que los guantes de cashmere carísimo no son "cool" y mejor hay que cortarles los dedos para que se vean como los de Harry Potter jugando Quidditch? Grrr. Esos aztecas sí que sabían de educación y no se andaban conque los derechos de los niños y que mejor explícales y no les pongas una mano encima y blá blá blá.
Por cierto, la conferencia fue un éxito rotundo. Claro, el único cuestionado fue el pequeño P, con preguntas del tipo: ¿Y en "aquellas" partes también les pinchaban con espinas?" o "¿No podían negociar los castigos?" o "¿Qué pasaba si se escapaban para evitar el castigo", etc. etc. Aclaremos que la clase de mi pequeño se compone de 19 varones (machines) y 3 niñas. De ahí el tipo de preguntas.

Colofón: Cuenta la nana de P, que proviene de un pueblo del Estado de México que en su infancia tanto su padre como su maestro de escuela le aplicaba el castigo de las espinas de maguey!!!!! Sí, ataban esas espinas a un palo de escoba y con eso el maestro los pinchaba desde su escritorio cuando estaban hablando en clase o el padre lo hacía cuando llegaban a casa con una mala calificación o un reporte. ¿¿¿¿¿Qué tal??? 500 años después seguimos iguales. Bueno, en los castigos. Si siguiéramos igual de conquistadores que los aztecas ya no existiría Bush ni habría crisis y los billetes serían barras de cacao. Lástima.

Por cierto, el original del Códice Mendoza está bien resguardadito en lo oscurito de la Universidad de Oxford... ¡me lleva! A ver, otro valiente mexicano que se lo regrese a México, por favor!!!!!!

domingo, 23 de noviembre de 2008

Pequeñas cosas

Es difícil resistirse a leer obsesivamente noticias sobre el desarrollo de la crisis financiera mundial. Son noticias desalentadoras y muchas veces con poca, muy poca información dura y mucha especulación. Todos hablan de tiempos difíciles y pocos dan herramientas para enfrentar la crisis más allá del consabido "ahorre, esconda sus tarjetas de crédito, cuide su trabajo". No es fácil pues sustraerse a este bombardeo de información y desazón. ¿Qué hacer entonces? Supongo que trabajar, apreciar las cosas buenas de la vida que ya tenemos y esperar tiempos mejores. En mi caso los abrazos de mis hombres, los resultados positivos de mis exámenes clínicos, mis clases de tenis del fin de semana, las reuniones con amigos que me aprecian, la luna de invierno, el sabor de las salsas picantes de Soco, los tacos de mixiote del tianguis de los jueves, Jairo Calixto y su columna en Milenio, los alcatraces que florean en mi jardinera, el aroma del café de cada mañana, mis botines de tacón nuevos, la lectura de mis blogs favoritos, mi pluma fuente de punto extrafino y mi Moleskine... todo éso, pequeñas cosas, frivolidades, me hacen la crisis más llevadera.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

¡¡¡¿Qué nos falta?!!!

Primero, el segundo hombre más protegido del país muere en un avionazo por falta de pericia del piloto. Luego, la secretaria de Educación confunde dos veces en dos diferentes eventos, la obra del laureado escritor homenajeado. Hoy, conocida refresquera anuncia milenarios recortes de personal en el país que le reporta la mayor utilidad. ¿Qué nos falta? ¿Que México pierda contra Honduras hoy por la noche? ¡Me lleva la que me trajo!

martes, 18 de noviembre de 2008

Ya no quiero ser como Heidi Klum


Foto: Louis le Grand para Altes Museum Berlin (Berliner Museumsinsel)

Noticia del www.26noticias.com.ar:

Revelan que Cleopatra era negra, narigona y no se bañaba en leche

¿Alguien se atreve a refutar la teoría de que la inteligencia es la mayor arma de seducción?

p.d. Ya hablando en serio, dudo mucho que una egiptóloga tan prestigiosa como es la Tyldesley se haya expresado en esos términos de la última Faraón de Egipto.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Rosarios en el espejo retrovisor

Poco a poco logro asimilar esa costumbre tan mexicana-guadalupana-clasemediera de ver espejos retrovisores en loa autos con un rosario enredado. Al parecer, los dueños de dichos vehículos, aún cuando manejen endemoniadamente, sin respetar señalización, sin la menor cortesía ante los peatones y tratando repetidamente de burlar el reglamento de tránsito, piensan que el hecho de colocar dicho objeto, los va a salvar de desgracias como asaltos, accidentes y demás. Como el vehículo en gran parte de los casos es la pertenencia más preciada, junto con el televisor de plasma, de muchas familias mexicanas, me parece comprensible la colocación del rosario o crucifijo o en algunos casos de estampita en el retrovisor. Lo que me viene a asombrar el día de hoy es que me contaron que hay una oración especial para bendecir los coches! Resulta que una compañera de trabajo pudo adquirir, con mucho esfuerzo, una camionetota nueva, así que, rauda y veloz, saliendo de la agencia, se lanzó a la iglesia para pedirle al padre bendijera su veloz y carísimo automotor. Pues bien, el padre no sólo recitó la oración creada ex profeso y echó agua bendita al rosario que posteriormente se colocaría en el retrovisor, sino que también roció el coche completo con agua bendita!!! Coche completo significa llanta por llanta, motor, batería y mangueras, asientos, cajuela, puertas y toldo!!! Aún no lo creo. Me parece de una ingenuidad tan apabullante que no pude dejar de escribirlo.

viernes, 7 de noviembre de 2008

London, we will meet there, it's a date!

Enjoy.